«Nosotros crememos que estos 40 años de justicialismo en Maipú ya son suficientes, es el mismo equipo con sus cambios y el paso del tiempo. Si tenían algo bueno para dar, ya lo dieron y además la ciudadanía de Maipú ya los premió en sucesivas elecciones municipales. Les venimos a pedir que nos den un voto de apoyo a algo que sea alternativo, algo que sea nuevo a la administración de estos 40 años» así presentó Alfredo Cornejo la candidatura de Nestor Majul como candidato a intendente del departamento de Maipu.

Maipú es la única comuna que no pudo gobernar aún el radicalismo desde el retorno de la democracia y el gran bastión que le queda al peronismo en la región. Es el tercer departamento más poblado de la provincia (214.412 habitantes según el Censo 2022), lo que representa una importante porción del electorado total.

En el Arena Maipú realizó una presentación con la presencia de los intendentes Tadeo García Zalazar, Daniel Orozco, Ulpiano Suarez y del vicegobernador de Mendoza, Mario Abed. Es sin dudas una apuesta fuerte del cornejismo y Cambia Mendoza.

En su cuenta de Facebook el propio Nestro Majul castigó a Stevanato y su gestión: «Los mismos personajes llevan 40 años gestionando el municipio. 40 años sin alternancia y con concentración de poder del peronismo, hoy kirchnerismo, que se ve reflejado claramente en los barrios, pero ellos tienen un relato que no coincide con la realidad de las y los maipucinos.»

Néstor Majul es el precandidato a intendente que nació, creció y vive en ese departamento, más precisamente en el distrito de Cruz de Piedra. Es padre de dos hijos, y abuelo. Milita desde los 17 años, desde la vuelta a la democracia, en la Unión Cívica Radical (UCR). Su primer espacio dentro de la política fue como secretario de organización de la Juventud Radical y del Comité Nacional. En la actualidad, se desempeña como el subsecretario de Relaciones Institucionales del Ministerio de Seguridad.

Será la segunda vez que Néstor Majul busque quedarse con la intendencia del municipio. En 2019, obtuvo el 39% de los votos, por detrás del 46% que sacó el todavía intendente Matías Stevanato. Ahora aprovechando un escenario poco grato para el peronismo, que se vio obligado a desdoblar las lecciones en todos sus departamentos, busca dar el golpe de gracia que posibilite el recambio y por fin sentarse en la silla grande del departamento.