La disputa en torno al modelo económico de Mendoza se recalienta en plena antesala electoral. El diputado provincial Guillermo Mosso (Cambia Mendoza) lanzó una contundente crítica hacia el dirigente sancarlino Jorge Difonso (Unidad Popular) y el rol que, según él, ha desempeñado en el estancamiento económico de la provincia. Difonso respondió con contundencia y responsabilizó al gobierno de Alfredo Cornejo de dejar de atender al campo y de priorizar nuevos negocios mineros.
En un artículo de opinión, Mosso afirmó que Difonso “le atrasó 20 años el reloj a Mendoza” y que, bajo el argumento de oponerse a nuevos desarrollos mineros, “la provincia perdió inversiones, nuevos trabajos y una diversificación de la matriz productiva”, mientras que regiones como San Juan muestran un camino más próspero a partir de asociaciones “modernas y sostenibles” en el sector extractivo.
Además, el diputado del Pro —cercano a Patricia Bullrich, pero sin dejar de pertenecer a Cambia Mendoza— calificó de “pyme electoral” el posicionamiento de Difonso, considerando que el dirigente se ha aferrado a la minería como un trampolín político. Según Mosso, el sancarlino habría utilizado el miedo de la opinión pública para demonizar nuevos proyectos, sin tener en cuenta que el marco legal vigente (la Ley 7722) ya fija requisitos específicos para prevenir daños ambientales y salvaguardar el uso del agua.
Frente a eso, Difonso salió a desmentir categóricamente las afirmaciones de Mosso, considerando que están “llenas de falsedades e ilusiones” que muestran un paisaje muy distante de lo que viven los mendocinos. Según el dirigente de Unidad Popular, si el campo atraviesa una caída de rentabilidad, eso se relaciona más con las prioridades del gobierno que con las posiciones de la oposición. “En primer lugar, si el agro y la vitivinicultura están sin fuerza, eso se debe a que esta gestión decidió dejar de atenderlos para concentrar sus inversiones en nuevos negocios para sus amigos”, afirmó.
Difonso también enfatizó que el agua de Mendoza atraviesa una situación de escasez, que podría empeorar si se habilitan nuevos emprendimientos mineros. Según el dirigente, tanto las asociaciones de regantes como las comunidades científicas muestran que el modelo extractivo implica nuevos riesgos para el medio ambiente. Por eso, planteó que el manejo del agua es un asunto de interés colectivo, que va más lejos que el mero interés económico de algunos grupos.
En el cruce, Difonso además le exigió tanto a Mosso como a Cornejo que se pongan a gobernar para dar soluciones a los problemas de la provincia, en lugar de buscar chivos expiatorios en la oposición. Por último, el sancarlino aclaró que la instalación de cartelería en la vía pública tiene como propósito dar a conocer sus posiciones y que analiza presentarse como candidato a diputado nacional junto a un frente que reúna a La Unión Mendocina y otras fuerzas.
No deja de ser curioso que un diputado oficialista responsabilice a un opositor por los problemas de la provincia, cuando claramente este no gobierna. ¿Que le molestara tanto al oficialismo?