Debido a las altas temperaturas que se están registrando y que se extenderán toda la semana, el Ministerio de Salud y Deportes brinda recomendaciones a la población para evitar un golpe de calor.
¿Cuáles son los síntomas y qué hacer cuando esto ocurre?
El agotamiento y golpe de calor son trastornos ocasionados por el aumento de la temperatura del cuerpo como consecuencia de la exposición prolongada a altas temperaturas y humedad o el esfuerzo físico intenso.
En estas situaciones, el cuerpo tiene dificultades para regular su temperatura. El golpe de calor es una forma grave de lesión por calor y la temperatura del cuerpo alcanza los 40° C o más.
Entre las medidas a tener en cuenta, se aconseja beber abundante agua durante todo el día, evitar el ejercicio físico al aire libre en horas de sol intenso y permanecer en lugares frescos.
La ingesta calculada de la población sana es entre 2 y 2,5 litros sumando bebidas y alimentos. En la época de altas temperaturas se debe agregar, por pérdidas adicionales por la temperatura ambiental y el ejercicio. La sed no es una alerta eficaz para una hidratación suficiente. La sensación de sed aparece cuando ya se ha perdido el 1 a 2 por ciento del peso en agua.
Teniendo en cuenta que la mejor fuente de ingesta es el agua potable y pura, su ingesta diaria no debería ser menor a las dos terceras partes de la recomendación diaria de agua, aproximadamente un litro y medio.
También es importante evitar el consumo de bebidas alcohólicas o muy dulces y las infusiones calientes; usar ropa suelta, de materiales livianos y colores claros y protegerse del sol con sombrero o gorra.
Las personas mayores de 65 años y los niños y quienes padecen enfermedades crónicas, respiratorias o cardíacas, hipertensión arterial, diabetes y obesidad deberán extremar más los cuidados.
Recomendaciones para los grupos de riesgo
Para lactantes y niños pequeños
- Dar el pecho a los lactantes con más frecuencia.
- Hacer que beban agua fresca y segura.
- Trasladarse a lugares frescos y ventilados.
- Ducharse o mojarse el cuerpo con agua fresca.
Adultos mayores y personas con enfermedades crónicas
- Tomar abundante líquido, en especial agua, al menos 2 litros diarios y con frecuencia, aunque no se sienta sed.
- Evitar salir a la calle en las horas más calurosas del día.
- Cubrir la cabeza con sombrero o gorra y vestirse con ropa ligera, de colores claros.
- Usar anteojos para protegerse del sol.
Para los jóvenes y adolescentes
- No consumir bebidas con alcohol, ya que aumentan la temperatura corporal y las pérdidas de líquido. No es conveniente tomar cerveza para aliviar la sed y el calor.
- Evitar los esfuerzos físicos o actividades deportivas exigentes.
- Sentarse y descansar cuando sientan mareos o fatiga.
- Recordar las recomendaciones generales sobre la hidratación, alimentación y refrescar el cuerpo.
Recomendaciones generales
- En caso de tener que salir a la calle, caminar en lo posible por la sombra.
- Darse un baño diario, preferentemente en forma de ducha o bien refrescarse con paños húmedos.
- Es importante una buena nutrición: aumentar el consumo de frutas y verduras frescas.
- Evitar el alcohol, las bebidas con cafeína y las comidas calientes.
- Dentro de la casa, quedarse en la sala más fresca.
- En caso de no sentirse bien por el calor, pedir ayuda. Y si además aparecen síntomas como dolor de cabeza, dolor abdominal, náuseas, vómitos o mareos, consultar con urgencia al médico.
- En caso de vivir solo, tratar de mantenerse en contacto con alguien cercano.
Agotamiento por calor y golpe de calor en niños/as y jóvenes
¿Cuáles son los síntomas?
Es importante estar alerta a los síntomas y se debe consultar al médico y tomar conductas activas.
El agotamiento por calor es un estadio previo al golpe de calor y hay que reconocerlo para prevenir una situación más grave:
* Sudoración excesiva.
* En los bebés, puede verse la piel muy irritada por el sudor en el cuello, pecho, axilas, pliegues del codo y la zona del pañal (sudamina).
* Piel pálida y fresca.
* Sensación de calor sofocante.
* Sed intensa y sequedad en la boca
* Calambres musculares.
*Agotamiento, cansancio o debilidad.
*Dolores de estómago, inapetencia, náuseas o vómitos.
*Dolores de cabeza.
*Irritabilidad (llanto inconsolable en los más pequeños).
*Mareos o desmayo.
Golpe de calor, situación muy grave:
- Temperatura del cuerpo 39°C – 40°C o mayor, medida en la axila.
- Piel roja caliente y seca (se agota la transpiración).
- Respiración y frecuencia cardíaca acelerada.
- Dolor palpitante de cabeza.
- Alteración del estado mental y del comportamiento, como vértigo, mareos, desorientación, delirios, confusión o pérdida de conocimiento.
- Convulsiones.
¿Cómo actuar si ocurre?
¿Qué hacer ante un niño con agotamiento por calor?
*Dar a los lactantes el pecho con más frecuencia.
*Trasladarlo a un lugar fresco y ventilado, si es posible con aire acondicionado.
*Desvestirlo (exponer el cuerpo al fresco).
*Ducharlo o mojar todo el cuerpo con agua fresca.
*Que esté quieto y descanse.
*Consultar a su pediatra o a un centro de salud.
*Darle de beber agua, si está consciente.
Qué no hacer
- No administrar medicamentos antifebriles.
- No friccionar la piel con alcohol, porque causa intoxicación.