Según trascendió estos últimos días tuvo lugar una cena con muchos protagonistas de peso en Guaymallén. Es de que de la misma participaron el actual senador y ex intendente, Marcelino Iglesias, y un grupo de funcionarios de la actual gestión del municipio.

¿Cuál fue el motivante de dicha cena? Agruparse como bloque para disputarle lugares a Calvente a través de una interna. Según fuentes cercanas que habría propuesto esta moción sería el actual concejal Miqueas Burgoa, quién ve lejana la posibilidad de renovar su banca dentro del concejo deliberante. Esta moción fue secundada por algunos de los funcionarios que prestan servicio en el municipio pero tienen filiación por el ex intendente.

También se supo que Iglesias no habría tomado parte por la moción, ni a favor ni en contra, pero sería quién viabilizo la reunión de los “opositores”. Esta interna entre Calvente e Iglesias no es nueva, ya que se sabe que el actual senador tenía seguir manteniendo el poder y controlar todo a control remoto.

Esta situación pudo, ¿o no?, ser el detonante del anuncio del intendente guaymallino que trascendió esta mañana y que fue todo un cimbronazo pidiendole la renuncia a todo su gabinete para proceder a un reordenamiento de toda la gestión.

En la previa de un año electoral que estará cruzado por muchas variantes, nadie quiere dormirse en los laureles, y tal parece menos en el municipio de Guaymallén.